sábado, 29 de marzo de 2008

Francisco de Cascales (1550-1642)


En torno a 1550 nace en Murcia el gran humanista, polígrafo insigne y escritor don Francisco de Cascales. Y nació en un huerto real situado cerca de la parroquia de San Andrés, junto a la acequia de la Aljufia. Luis de Ayllón, su padre, un comerciante que años más tarde, acusado de herejía, fue encarcelado por la Inquisición, lo había alquilado y comprado después, en 1548. La partida de nacimiento de este gran murciano desapareció hace años. Todos sus hermanos, de los que hay constancia bautismal, nacieron en la ciudad y fueron bautizados en la parroquia de Santa Catalina. Los hermanos Cascales, posiblemente por este orden cronológico, fueron Andrés, Jerónimo, Alonso, Leonor -muerta niña- y Ginesa. Francisco nacería después de Jerónimo y antes que Leonor. La niñez y juventud de estos Cascales que toman el apellido de la madre, según costumbre de entonces, sería bien triste, con sujeción a estrecheces económicas. Eran, en su ciudad, hijos de una señora con pujos de nobleza y sin medios de ostentarla con dignidad. Jerónimo y quizá también Andrés, se acercan pronto a la carrera militar y con ellos arrastran a Francisco, que estuvo en Francia y los Países Bajos. Luego extendería Cascales sus viajes a Nápoles y alguna otra ciudad italiana. Durante un espacio de tiempo cuya importancia se desconoce, estudia en Granada. La biografía de Francisco de Cascales se afianza a partir de 1595. En enero de este año ya está casado con doña Petronila de Quirós. La situación económica del escritor queda asegurada con este matrimonio. Cascales persigue una cátedra de Latinidad y Retórica en el recién fundado Seminario de San Fulgencio. Está atento, desde Cartagena, a las posibilidades de llegar a este cargo. Por fin, en 1601, muere el catedrático Camarino, se convocan unas oposiciones y gana la cátedra. El matrimonio con Petronila debió ser un fracaso. Al morir ésta, el ilustre licenciado no tarda más de cuatro o cinco meses en contraer nuevas nupcias. Se casa esta vez con doña Juana Ferrer Muñoz, quien aporta al matrimonio casas en Trapería y Platería, joyas y ducados sueltos para ir gastando. En 1614 le compensa el Concejo con cien ducados por haber ido a la Corte a pedir licencia para publicar sus famosos "Discursos Históricos", y por el trabajo de haberlos escrito. Después la emprende con sus "Tablas poéticas" y la llamada "Crónica de Murcia". De su segundo matrimonio tuvo cuatro hijas. Dos casaron y las otras entraron en religión en el monasterio de Clarisas de Murcia, donde una de ellas llegó a ser abadesa. Nuestro ilustre hombre falleció en Murcia en 1642, siendo enterrado en la iglesia de Santo Domingo en la que hay una lápida que le recuerda.

Presentación

¡Hola a todos!, os presento "Rincón_Murci@no", un blog en el que pretendo dar a conocer datos interesantes sobre la cultura de nuestra bella Región. Hablaré de personajes históricos, gastronomía y vinos, rutas turísticas, tesoros artísticos, pueblos murcianos, fauna y flora, artesanía... ¡Espero que os guste!.